SÍNTOMAS FÍSICOS DE DESEQUILIBRIO
- alergias
- erupciones cutáneas
- enfermedades y funciones del hígado
- dolores en el hipogastrio
- inapetencia
- vómito
- dolores de cabeza en la cima del cráneo
- edema del escroto en los hombres y del hipogastrio en las mujeres
- problemas con inclinar el torso hacia atrás y para frente
- dolores en la región lumbar y de la cabeza
- tinnitus
- visión desenfocada
- ojos secos
- sentimiento de llenura debajo de las costillas
- constipación
- diarrea
- trastornos digestivos
- enuresis o dificultad de orinar
- cansancio elevado
- edema intermitente del escroto
- calambres musculares en el transcurso de la vía
- enfermedades de tendones, articulaciones y de los tejidos conjuntivos
- la cara está seca y tiene el color de polvo
- uñas blandas, débiles, frágiles
- cabello sin brillo
- inmunidad reducida en contra de las enfermedades
SÍNTOMAS PSÍQUICOS DEL DESEQUILIBRIO
- agresividad
- autoconfianza exagerada
- vanagloria o, al contrario falta de orden
- indecisión
- prudencia
- autocontrol excesivo
- sentimiento de autocontrol débil
- comportamiento y emociones desequilibradas
- estallidos de furia
- ira
- manifestaciones impulsivas
- irritación elevada
- excusas incesantes
- hipersensibilidad al ruido, olores y sabores
- frustración
- inflexibilidad del pensamiento
- fatiga de trabajar excesivamente e incapacidad de relajarse
- planeamiento excesivo
- adaptabilidad
- obstinación
- rabia en contra de aquellos a quines les va bien
Una vía yin que asciende hacia arriba desde la base de la uña del pulgar, a través del empeine, el talón interno, arriba de él cruza la vía del bazo y sigue detrás de ella por el lado interior de la pantorrilla y del muslo hasta la pubis donde va alrededor de los órganos sexuales externos. Luego sigue por la parte baja del abdomen gira hacia fuera por debajo de las costillas libres. El tramo siguiente se conecta al estómago, hígado y la vesícula biliar. Probablemente se trata de una rama interna. Desde el hígado la vía sigue por la parte interna del torso pasando por el diafragma, bajo las costillas hasta el cuello, detrás del esófago entra en la cavidad nasal y tras ella en los nervios oculares. Sigue hasta la nuca donde se conecta con el canal de control. Desde los nervios oculares se dirige una ramita hacia las comisuras labiales y por dentro rodea los labios. La última rama corta sale del hígado, penetra el diafragma y se distribuye en los pulmones; sin embargo según algunas fuentes continúa hasta la región del estómago y del calentador medio.